adenocarcinoma de pulmón
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Abril de 2010
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Día 1. Me he levantado muy pronto y me he puesto a hacer torrijas (ya es la segunda tanda, anteayer hice la primera pero no lo puse, se me olvidó). Luego me he vuelto a meter en la cama. Sigo sin nada de apetito y con frío. Día 2. Sigo con los dolores de todos los días. A lo mejor es el antiinflamatorio (Naproxeno) que he dejado de tomar. Ahora, visto el dolor de estómago que tengo, he dejado de tomar todo lo que sea química excepto las setas y las vitaminas. Por la tarde un buen paseo aprovechando que hace un sol espléndido. Día 3. Comiendo con mis cuñados y sobrinos. Todavía no hace calor como para salir al jardín. Toda la tarde helado. Me tomo de nuevo el antiinflamatorio (Naproxeno) por la noche. Día 4. Me siento bien todo el día. Será por el antiinflamatorio (Naproxeno) de ayer. Incluso por la tarde me atrevo a ir de compras a Alcampo. Día 5. Me encuentro bastante bien,
Para el que sea curioso y entienda las características: - Memoria 8 Gb DDR3 Qué contento estoy... por los niños más que nada, porque yo, últimamente lo uso sólo para acceder al trabajo, al correo y a esta página Web. Hoy sólo he tenido dolor de pies al andar. Y eso que no me he tomado ni una medicina, sólo las setas y las vitaminas. Días 6 y 7. Como otras veces por la mañana perfecto (debe ser que aún estoy bajo los efectos del antiinflamatorio [Naproxeno]) por las tardes dolor de espalda y de piernas. Día 8. (Peso: 76.800). Voy a hacerme la Gammagrafía. A las 9:00 h. me inyectan el contraste y me dicen que vuelva a las 12:15 h. Salgo a las 13:00 h y hasta me dan los resultados en un sobrecito, que, por supuesto, no dudo en abrir. Para mí no son muy alentadores:
Y ahora, yo por dentro:
A ver qué me dice la oncólogo mañana que me toca quimioterapia.
Día 9. A las 8:00 ya están haciéndome el análisis de sangre. A desayunar y a las 10:10 me llama la doctora. Le comento mi preocupación por lo del bultillo en la 8ª costilla trasera derecha y por las rodillas. Me dice que a ella le da la sensación de que no son tumores, que eso lo dirá más claramente el TAC que me tienen que hacer el lunes (aunque los resultados tarden, por lo menos, doce días). Y en caso que fuesen tumores, están muy localizados, y serían fáciles de tratar con radioterapia. Paso a que me den las cuatro pastillas de quimioterapia oral (Vinorelbina). Vuelvo a casa más tranquilo que ayer. De todas formas ¿quién me manda abrir un sobre que no está destinado para que lo lea yo?
Por la tarde un poquito, no mucho, de malestar de estómago y de rodillas. Día 10. Bastante bien para haberme tomado ayer la quimioterapia. Por la tarde algo de malestar y bastante tos. Creo que me enfrié el día 8. Día 11. Toda la noche tosiendo y con muchas flemas. Al mediodía comiendo en casa con nuestros vecinos. Por la tarde vuelve la tos y el malestar. Día 12. Hoy me hacen el TAC. A las 09:00 h desayuno, tengo que ir
en ayunas de seis horas.
En vista de la tos tan constante y fuerte que tengo, voy a mi doctora de cabecera. Me manda antibiótico.
Hablamos sobre la manchita que aparece en la Gammagrafía, sobre la costilla. Me da ánimos y me dice que aunque fuese tumoral,
se ve muy nítida y localizada y sería fácil tratarla con radioterapia.
De paso, aunque tengo un catarro de caballo, pido el alta. Sigo con mi tos. A las 15:30 me hacen el TAC, tanto cerebral como de tórax y abdomen. De las rodillas no me lo hacen porque dicen que hay una máquina especializada y se hace bajo petición del especialista. Como un sándwich de chicharrones al salir del Hospital. Cuando llego a casa, estoy fatal, me tumbo en el sofá y cuando me despierto, vomito lo poco que había comido. Me pongo el pijama y me meto en la cama. La tarde la paso casi todo el rato durmiendo y tosiendo. A las 21:15 me despierto y como un plato de sopa de tapioca y media tortilla de un huevo (no me entra más en el estómago). Un rato después de tomar las pastillas (para la tos, el antiinflamatorio [Naproxeno]...) parece que me encuentro mejor. Día 13. Voy a trabajar sin avisar a nadie. Cuando me ven los compañeros, se alegran mucho de que me reincorpore. Lo de ir a trabajar de forma presencial es lo mismo que hacía cuando estaba de baja, pero madrugando y perdiendo tres cuartos de hora en el coche... Día 14. Pues buen comienzo tenemos.
Por la mañana tengo tal catarro que no se me entiende (por la afonía), una tos tremenda durante toda la noche
(aunque eso me dijo la oncóloga que probablemente sería de la enfermedad) y un atasco de nariz increíble.
Así que cuando puedo me levanto y a hacer lo de estos días de atrás: Teletrabajo.
Parece que se me pasan algo los síntomas a lo largo del día, pero al llegar la tarde vuelvo a toser y a "moquear".
Día 15. Sigo con mi catarrazo y sin salir de casa. Día 16. (Peso: 75.600). A primera hora análisis de sangre y a esperar la hora y media de rigor a que nos llamen. Cuando lo hacen, me dice la doctora que no tiene buenas noticias: sólo ha llegado el escáner de cráneo. Así que el de tórax y abdomen lo veremos el día 30. Respecto al que ha llegado, son buenas noticias. Pone:
Me dice que dependiendo del resultado del TAC la próxima vez decidirá si dejamos la quimioterapia o damos dos sesiones más. Paso a tomarme las pastillitas (Vinorelbina) y para casa. Al despertarme de la siesta, me acuerdo que no he tomado el antibiótico.
Me lo tomo. La mezcla resulta fatal para el estómago. Paso el resto del día sin comer nada, con diarrea y con dolor de estómago.
Día 17. Sigo fatal. A quién se le ocurre mezclar quimioterapia con antibióticos... Vaya día... Día 18. Vamos a celebrar el cumpleaños de mi suegro, como siempre, comiendo fuera de casa. Yo, directamente, viendo las náuseas que llevo, sólo como un mini-cachito de pollo y otro de entrecot. Ahora, además, parece que estoy embarazado. Me repugnan determinados olores. Por ejemplo, el de la cebolla. (Con lo que a mí me gusta). Pues oler cualquier guiso hecho con cebolla me produce náuseas. Espero que sea una racha corta, porque a este paso, entre la falta de apetito, los olores raros y las vomitonas, me voy a quedar flacucho como un palillo. Día 19. Voy a trabajar de nuevo. Ya no me acordaba. Es lo mismo que hacía cuando estaba de baja pero madrugando...
Sigo revueltillo, sin nada de apetito y con un asco a determinados olores de comida... ¿
Me habré quedado embarazado? Día 20. A trabajar. A media mañana me acerco al Hospital para que me vea el especialista en digestivo (por la hepatitis C). Me manda análisis y una ecografía. Por la tarde cada vez me encuentro peor. Tengo un dolor de estómago increíble. Voy a mi doctora, que tengo cita con ella, y me dice que cree que todo son síntomas de los efectos secundarios de la quimioterapia. Me manda unas ampollas para abrir el apetito, Dynamogén. Ceno muy pronto, y a las 10:30 h. estoy en la cama. Con dolor de espalda, de estómago, musculares...
A las tres de la mañana me levanto a tomar el antiinflamatorio (Naproxeno). Al pasar tres cuartos de hora me duermo como un angelito. Día 21. Sigo bajo los efectos del antiinflamatorio (Naproxeno). Ningún dolor ni molestia. Ceno con apetito. Como por la noche empiezo a tener malestar de nuevo, tomo un comprimido de Paracetamol. Duermo bastante bien y hasta parece que la tos va disminuyendo. Día 22. (Peso: 74.500). Toda la mañana trabajando. Todo bien excepto el dolor de talones al andar. Después de comer empieza el dolor de estómago. No sé a qué será debido. Parece que la sensación de náusea al oler determinados guisos ha desaparecido algo. Día 23. Trabajando. A última hora hacemos una mini-fiesta de despedida a un compañero que se jubila.
¿Dolores? Los de siempre. Talones y estómago. Con Paracetamol parece que remiten. Día 24. En casa toda la tarde. Día 25. Dolores musculares y de articulaciones. Según va pasando el día voy notando que me va subiendo la fiebre. A las 21:00 h llego a 38°. Medio ceno, me tomo el antiinflamatorio (Naproxeno) y me voy a la cama entre tiritonas y castañeteo de dientes. Día 26. Aunque se me ha pasado la fiebre sigo con molestias por todas partes. Por cierto, que esto es digno de verse. Este es el estado de las consultas de oncología del Hospital de La Paz cuando llueve:
Tal es el estado del suelo que deben advertirlo mediante carteles:
En la sala de espera es frecuente ver un cubo para recoger el agua cuando cae. Por no hablar del frío. En la sala de espera hace una temperatura más o menos agradable. Pero como somos tantos tenemos que pasar al pasillo donde también han puesto asientos. Todos los catarros de este año me han salido allí. Si no fuese por la amabilidad de las enfermeras no se podría estar allí. Y esto es oncología. No quiero ni pensar cómo deben estar otros servicios cuyos pacientes no tengan enfermedades graves.
¡Esto es la Sanidad de Madrid en el siglo XXI !. Días 27 y 28. Como en días anteriores aunque cada vez me duelen más los talones al andar. Día 29. Voy a acupuntura (duodécima sesión) le comento mis dolores de pies y talones y me pone las agujitas de siempre. Por la tarde un ligero malestar. De todas formas mañana tengo los resultados del TAC y estoy algo nerviosillo. Día 30. (Peso: 75.000). A las 8:00 análisis y hasta las 11:30 no nos llaman a consulta. Buenas y malas noticias. Las buenas: Lo de las costillas parece ser un callo óseo de alguna fractura antigua (y yo sin enterarme...).
Las malas: Parece que lo de los pulmones está más extendido.
Bueno, pues habrá que seguir luchando. La oncóloga me ha citado para el viernes que viene porque quiere consultar qué medicación darme. (Cada vez quedan menos). Al volver del Hospital nos pasamos por la doctora de cabecera para que vea los resultados. Para el dolor de talones me manda unas taloneras. ¡Que gustito! ¡Qué blanditas!... De lo demás, pues nada, a seguir esperando a que salga una terapia más efectiva. Paseo de media horita (que hace muy bueno) y a casa. |
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Marzo de 2010
hoy he dormido estupendamente. Como tengo el ordenador medio estropeado, me he ido con mi hijo mayor a mirar precios...
Como era de esperar, nos ha gustado uno y nos lo hemos traído.
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